PUNTUACIÓN
La puntuación constituye uno de los
recursos fundamentales para distribuir y organizar la estructura y el contenido
del texto escrito.
– Dificultad en su aprendizaje: libertad
para usar los signos de puntuación.
– Margen de subjetividad.
Los signos de puntuación transmiten instrucciones para
interpretar el texto.
Construyen el significado del texto, de ahí que en
función de las diversas puntuaciones que recibe una secuencia de palabras, se
produce una diferencia de significado.
– a) Señor: muerto está, tarde llegamos / Señor
muerto: esta tarde llegamos.
– b) Tú, hijo, come bien / Tu hijo come bien.
– c) Los niños, que han aprobado, irán de excursión /
Los niños que han aprobado irán de excursión.
– d) Juan es muy listo, estudia Derecho, hace deporte,
sabe tres idiomas y trabaja media jornada / Juan es muy listo: estudia Derecho,
hace deporte, sabe tres idiomas y trabaja media jornada.
– e) El santo comía como vestía y dormía sobre una
vieja estera. Un modo de vivir que asombraba a las gentes. / El santo comía
como bestia y dormía sobre una vieja. Este era un modo de vivir que asombraba a
las gentes.
USOS PRINCIPALES
- Separa elementos de una enumeración. Ej.: Mario es alegre, simpático, cariñoso y buena persona.
- Separa el vocativo. Ej.: Oye, tú, ven aquí.
- Separa incisos explicativos, sean aposiciones, oraciones de relativo u otro tipo. Ej.: Mis hijos, Álvaro y Alonso, son gemelos.
- Separa la principal de la subordinada cuando esta va delante. Ej.: Si comes mucho, engordas.
- Detrás de locuciones adverbiales. Ej.: He estudiado toda la tarde; sin embargo, me ha valido de poco.
- Separa complementos oracionales, ya sean adverbios o construcciones preposicionales. Ej.: En primer lugar, no todos tenemos las mismas oportunidades.
- Cuando se elide el verbo porque se sobreentiende. Ej.: Juan estudia Derecho; yo, Medicina.
- Separa oraciones unidas por la conjunción y cuando no constituyen elementos de una misma serie o enumeración. Ej.: Esta tarde hay clase, y, que yo sepa, nadie lo sabe.
- Separa elementos topicalizados. Ej.: En cuanto a los profesores, he de decirte que…
- Oraciones coordinadas o yuxtapuestas con valor distributivo. Ej.: Unos dicen que sí, otros dicen que no.
- Delante de las oraciones adversativas. Ej.: Ayer fui al partido, pero no me gustó.
- Delante de etcétera. Ej.: Te daré manzanas, naranjas, limones, etc.
- Nunca debe separar el sujeto del verbo, a no ser que éste formado por una secuencia muy larga.
- No se pone nunca coma delante de un paréntesis, pero sí detrás.
EL PUNTO
TIPOS
Punto y seguido (separa oraciones)
Punto y aparte (separa párrafos)
Punto final (indica fin de texto)
• Otros usos:
Indicar el final de una abreviatura. Ej.: Sr., D.
Separar los minutos de las horas. Ej.: 18.30 h.
No llevan punto los años. Ej.: 2003 y no*2.003
EJERCICIOS
RECUERDE que la buena puntuación es absolutamente necesaria para permitir una lectura adecuada del texto. La puntuación también puede ser
un rasgo de estilo. Algunos autores prefieren un estilo sincopado, con frases
cortas, independientes gramaticalmente, aunque realmente por el sentido, otros
prefieren frases largas y complejas.
1. Ponga los puntos y seguido y las comas que requiera el texto. En
consecuencia, también deberá poner las mayúsculas correspondientes. Advertimos
que en el texto no hay otro pido de puntuación que pudiera se equivalente, en algunos casos, como punto y aparte, punto y como, paréntesis, etc. El estilo
del autor es el que hemos llamado sincopado:
He venido por mi gusto. Contra el
parecer de los míos. Ellos siempre me guardaron del pecado y del extranjero, de ahí mi anhelo por el norte la mayor parte de la gente que conozco, si, ha estado
aquí, ha sido
de paso. También
yo daría marcha atrás a los cuatro días de coronarlo, no hay
motivos que me afinquen y eso no se improvisa, aquí nada me pertenece, ni nada
me reclama. Esperaba, es lo cierto permanecer ahora resulta inevitable, que no es
lo mismo, no tengo
por ejemplo dinero para el billete de vuelta.
ANTONIO J. DESMONTS, Los tranvías de Praga
2. Ponga las comas, los puntos y seguido y aparte que el texto requiera.
En consecuencia, ponga también las mayúsculas correspondientes. No hay otro
tipo de puntuación como guiones, paréntesis, etc. Las frases de la autora son,
aquí, más bien largo:
Estos visitantes sueles estar tomando las
aguas en otro balneario cercano y aprovechan estos días lluviosos para cumplir
la promesa hecha a su paisana, de que la iban a visitar cuando deja de
llover.
Antes de la noche, las tardes
recién puesto el sol, se quedan melancólicas y despejadas y es
mayor el silencio de los montes. Se oyen las voces de alguno que trepa allí, lejos a
buscar manzanas y se tiende sobre la tertulia de sillones de mimbre vueltos a
sacar.
Al paseo un cielo como de perla, como de
agua, con algún pájaro perdido, muy alto, un pájaro olvidadizo y solo, que parece
el primero del mundo.
Las mañanas de calor, es bueno
irlas a pasar a la sombra en el parque de atrás, cerca de la cascada.
3. Ponga las comas y los puntos y seguido, los puntos y aparte y los
puntos de las abreviaturas adecuados en la carta siguiente:
Distinguido señor, acabo de
recibir su carta del 20 de septiembre, en la que me especifica los requisitos y
documentos necesarios para poder ser admitido en la residencia que Ud. dirige
durante el próximo curso académico.
Le envío pues la siguiente documentación:
la hoja de solicitud rellenada una fotocopia de mi identificación, una
fotocopia del recibo de la matrícula de la Facultad de Medicina y un certificado de no padecer enfermedades contagiosas.
Estoy muy agradecida por su colaboración y
espero disculpe las molestias que le ha causado el hecho de que yo no pueda trasladarme a la ciudad hasta el 7 de octubre, por los motivos que le expuse
en la carta anterior
4. Ponga las comas, puntos y seguido y puntos y aparte. Por supuesto,
deberá poner también las mayúsculas correspondientes en los sitios adecuados:
Cuando era pequeño solía ir a esa tienda
era una de esas diversiones favoritas, le gustaba mirarlo todo aunque, nada comprase su mayor fascinación consistía en tratar de adivinar cuántos caramelos
contendría cierto gigantesco vi trolero. Una tarde encontró un billete de una alta
denominación tirado cerca de un árbol dudó, un rato antes de levantarlo al fin se
animó en un rápido movimiento lo levantó y lo metió a su bolsillo. Luego con
paso alegre se encaminó a la tienda. A nadie en casa le dijo de su hallazgo, permaneció
encerrado hasta la hora de la cena, cuando. luego de lavar sus manos
concienzudamente se unió a la familia que ya se encontraba reunida en torno a
la mesa, la vista del humeante plato de avena le provocó tal náusea que tuvo que correr al baño, al salir estaba tan pálido y tenía tal
retortijón que los alarmó a todos. Un rato después su misteriosa y súbita enfermedad era aclarada por el médico, quien, sonriente le explicó que aun cuando sean
los más finos que existen, nadie puede comerse impunemente tres kilos
de chocolate en una sola sentada.
He venido por mi gusto contra el parecer de los míos ellos siempre me guardaron del
ResponderEliminarpecado y del extranjero de ahí mi anhelo por el norte la mayor parte de la gente que
conozco si ha estado aquí ha sido de paso también yo daría marcha atrás a los cuatro
días de coronarlo no hay motivos que me afinquen y eso no se improvisa aquí nada me
pertenece ni nada me reclama esperaba es lo cierto permanecer ahora resulta inevitable
que no es lo mismo no tengo por ejemplo dinero para el billete de vuelta
ANTONIO J. DESMONTS, Los tranvías de Praga